BENJAMÍ D 4-1 OLÍMPIC LA GARRIGA

Último  partido del año, contra uno de los equipos con más goles a favor de la liga y 4º clasificado. Un partido complicado contra un rival duro pero que gracias a un buen partido y a un poco de suerte en ciertos momentos del partido nos pudimos imponer 4 a 1, un resultado que no muestra la igualdad durante el partido.

Los primeros minutos fueron bastante buenos, jugando con la  cabeza, tocando el balón sin prisa. Pero a partir del gol visitante en el minuto seis ese juego se empezó a diluir poco a poco. En la última jugada del cuarto, un falta un palmo fuera del área a nuestro delantero Pau hacía que el árbitro pitara penalti a nuestro favor. Arnau lo transformaba en el empate a 1 y nos volvía a enganchar al partido.

El segundo cuarto empezaba con un chute que  casi lo convertimos en el 2 a 1 pero que se fue por poco. A partir de ese momento empezó el monólogo de ataques del equipo visitante. Las tuvieron de todo los colores pero los palos que estaban de nuestro lado y una gran parada de nuestro portero Xavi, después de un chute potente a apenas dos metros de la portería nos mantenían vivos en el partido.

Un tercer cuarto, bastante espeso por las dos partes hacía que el partido se transformara en un encuentro bronco, sin fluidez en el juego debido, seguramente, a la ansiedad de querer marcar por parte de los dos equipos. El cuarto acababa con el empate a 1 y con esperanzas de poder ganar.

En el último cuarto, tirando más de las ganas y la intensidad que del juego combinativo llegaba el 2 a 1 después de un chute de falta de Arnau que se paraba el portero y que nuestro medio Xavi cogiera el rebote y con una buena definición hiciera el gol que nos ponía por delante. A partir de ese momento nosotros nos crecimos y el rival se fue haciendo cada vez más pequeño y justo en la jugada siguiente, una gran jugada combinativa entre Arnau y Miquel por la banda izquierda tirando dos paredes seguidas y una buena definición de Miquel ponía la tranquilidad en el marcador con el 3 a 1. Ya en el último minuto, una jugada individual de Arnau donde se iba de hasta tres jugadores acababa con un chute que se estrellaba en el palo pero que, como en el segundo gol, Xavi cogía el rebote y ponía el 4 a 1 definitivo.

Buen partido para acabar el año, con una victoria importantísima, donde se jugó más con el corazón que con la cabeza. Aún así muchísimas felicidades a los jugadores que lo dejaron todo en el campo. Ahora a descansar y a coger fuerzas para las vueltas de vacaciones para volver más fuertes aún.

Joan Gil i Adrià Hernàndez